Reseña | Nunca digas nunca de Amy Lab

Título: Nunca digas nunca.
Autoras: Amy Lab.
Páginas: 421
Encuadernación: Tapa blanda con solapas.
Editorial: Alfaguara.
Precio: 15,50 €
Publicación: Mayo de 2012
ISBN: 978-84-204-1276-4
Serie: ---

SINOPSIS

La vida de Jacq da un giro trágico cuando pierde a sus padres y se ve obligada a trasladarse a un pueblo de la sierra de Madrid junto a sus tíos. Mientras trata de reponerse, tendrá que adaptarse a un país que le resulta ajeno y a un grupo de desconocidos, entre ellos, Samuel. Pronto se hará hueco entre su pandilla e irá ganándose la confianza de todos, excepto la suya. Pero, ¿qué es lo que le ocurre a ese chico? ¿Cuál es la razón de ese halo enigmático que lo envuelve? Jacq no puede evitar hacerse preguntas acerca de este extraño que ahora duerme en la habitación de al lado y por el que empieza a sentir algo que se niega a reconocer. Las tardes en el bar, las risas en el lago y las fiestas nocturnas se convertirán en su día a día, pero tras todo ello se guarda un secreto que todos conocen y que nadie parece querer desvelar. Cada gesto es una señal; cada trozo de pasado, una pista a seguir... y a Jacq se le acaba el tiempo. ¿Será capaz de unir todas las piezas del misterio?

(3.5)

OPINIÓN

Nunca digas nunca nos cuenta la historia de Jacq, una joven a la que los padres se le mueren, y no le queda otra que irse a vivir con la única familia que le queda a Madrid. Allí tendrá que acostumbrarse a su nueva vida, y sobretodo, a su nueva "familia". Pero ciertas actitudes de su medio primo Samuel, le llevarán a descubrir cosas del pasado de este, y de sucesos que tuvieron lugar hace ya varios meses.

En un principio, Jackie era un buen personaje, para mi gusto: acababa de perder a sus padres y por ello era una chica reservada, que lo único que quería era estar tirada en la cama, olvidarse de que existía el resto del mundo y desear haberse quedado en su país con su mejor amiga. Pero conforme avanzaba la novela, eso que en un principio me había gustado de ella, que fuese un personaje realista y muy creíble, se fue difuminando hasta acabar desapareciendo. Llega un punto en la novela, que lo único que le importa es su primer amor y parece que se olvida completamente de lo que les sucedió a sus padres. A ver, no pretendía que estuviese amargada toda la novela, pero si que me hubiese gustado que, algo tan importante como la muerte de unos padres, hubiese jugado un papel más importante en su forma de ser y en la historia.

Había aprendido que, por muy grande que sea la lesión, acaba cicatrizando, aunque el punzante dolor inicial nos haga dudar de que vaya a ser así.

Por otro lado, está Samuel. Es un personaje al cual me costó cogerle el punto. Ese halo de misterio que le rodea durante toda la novela, me gustaba, pero por culpa de ello no llegaba a conocer como me gustaría al personaje. La historia de amor que va surgiendo entre él y Jacq tampoco logró convencerme, aunque el hecho de que surgiese poco a poco, y no de repente (como yo me esperaba), fue un punto a su favor. 

Pero lo que finalmente consiguió engancharme a la novela, y que le diese la puntuación que acabé dándole, son los personajes de Marcos y Sandra. He visto en muchas otras reseñas que dicen exactamente lo mismo, y es que personalmente creo, que es lo que le da el punto entretenido y gracioso a la novela, lo que la hace amena. Desde que los conocí al principio de la historia, no dejé de reírme con sus ocurrencias. Algo que me gusta mucho, no solo en las novelas, sino que también en la vida real, es que surja una relación entre dos mejores amigos, ya que creo que es cuando más conoces a una persona, sabes todo, o casi todo de él o ella... Su historia me pareció preciosa y muy tierna. Ademas, ambos son unos personajes sarcásticos, graciosos, nobles y extrovertidos: mi prototipo de personaje favorito.

- No lo sabía, perdona... Es extraño esto de las canciones, ¿no crees? Para mí I'm yours es ahora tu canción. Cada vez que la oigo irremediablemente pienso en ti.

Paralelamente a estas dos historias de amor, la novela contiene un misterio. Creo que no estuvo mal meterlo por el medio de dos historias de amor, pero a mí se me hizo bastante predecible. Al principio de la novela, cuando Jackie empieza a descubrir cosas, dudaba de lo que pasaba, pero al llegar a cierto punto de la novela, me di cuenta de por donde iban a ir los tiros. Igualmente, ha sido un detalle que me ha gustado bastante, y creo que el hecho de querer saber cómo acababa ese misterio, es lo que más me enganchó, y fue el empuje necesario para seguir leyendo.

La pluma de las autoras me gustó bastante, pues es sencilla y, en general, bastante atrayente. La novela sólo se me hizo pesada al principio, cuando casi todo se basaba en descripciones y no había apenas diálogos, pero poco a poco fue cogiendo agilidad y consiguió atraparme.

Resumiendo, Nunca digas nunca es una novela sencilla, que aunque tuvo varios detalles que no lograron convencerme, me entretuvo lo suficiente como para no catalogarla como una mala lectura. Los personajes de Sandra y Marcos fueron, sin duda alguna, lo mejor de la novela, y ese halo de misterio que envuelve toda la historia hizo que quisiese seguir leyendo.